Las Kaaskroketten o croquetas de queso son uno de los platos más reconocidos de la cocina belga, su aspecto muy similar a las croquetas tal y como las conocemos en España, junto con su increíble sabor harán que no puedas parar de comerlas. Coge papel y boli y prepárate porque esta receta dejará a tus comensales boquiabiertos.
¿Qué necesitamos?
- 1/2 l de leche entera
- 50 gramos de mantequilla sin sal
- 50 gramos de harina normal
- Una pizca de sal, pimienta y nuez moscada.
- 250 gramos de queso gouda.
- Pan rallado
- 2 huevos.
¿Qué pasos debemos seguir?
- Cocinar ligeramente la harina junto con la mantequilla en una olla para eliminar el sabor a crudo de la misma.
- Cortar el queso en porciones que sean fácilmente integrables en la mezcla posteriormente (cuadraditos de 1 cm aproximadamente).
- Verter la leche bien caliente (debemos tenerla caliente con anterioridad), remover para integrarlo todo y eliminar los grumos de nuestra bechamel.
- Añadir el queso, las especias y remover hasta que todo este integrado.
- Rectificar de sal y pimienta.
- Pasar la masa a una bandeja y dejar enfriar por unas horas o de un día para otro.
- Bolear y rebozar las croquetas en harina, huevo y pan rallado.
- Freír y disfrutar.
Con estos sencillos pasos te convertirás en un auténtico chef belga y podrás disfrutar de la gastronomía de este país en tu propia casa mientras esperas tu siguiente visita a Flandes. Ya no hay excusas, ¡manos a la masa! ¡Nos leemos pronto!
