En una de mis zonas favoritas de Bruselas se encuentran los estanques de Ixelles. Poder escapar de la ciudad ajetreada y acercarme tanto a la naturaleza es algo que agradezco. Es una zona verde que siempre está repleta de especies de aves poco comunes, y la inmensidad del agua transmite mucha tranquilidad. Además, se crea una imagen muy bonita del paisaje: el estanque con las aves y la iglesia de Flagey y los edificios Art Nouveau de fondo.
Los estanques de Ixelles son dos estanques alargados de agua dulce localizados en Ixelles, junto a Flagey y se prolongan hasta la Abadía de la Cambre. Se trata de los únicos que fueron salvados de la campaña de secado de los humedales del valle de Maalbeek y actualmente uno de los pulmones de Bruselas. Esta es una zona de recreo para los locales y, aunque el agua se encuentra contaminada y todo contacto está prohibido, numerosas aves acuáticas frecuentan los alrededores.
En Bruselas han estado bajando las temperaturas, estando algunos días bajo cero constantemente. Esto ha provocado el agua se congele casi por completo. Los patos siguen visitando el lado, pero esta vez caminan por encima!