¡Queridos lectores!
René Magritte es uno de los belgas más conocidos de la historia y también, uno de los pintores surrealistas más importantes. El mes pasado, durante mi visita a Bruselas, aproveché para visitar su museo y no me decepcionó.
Si bien es cierto que la exposición actualmente no se encuentra en su sitio original por restauración, igualmente sus obras se pueden visitar en el Museo Real de Bellas Artes de Bruselas. En cuanto al precio de la entrada, ‘en mi caso fueron 3 euros por ser estudiantes. Si no serían 10 euros, y 4 euros más por la audioguía.
Nada más entrar a la parte de Magritte hay una sala enorme en la cual hay pintada una línea cronológica. A través de ella, se nos explica la historia del pintor. Por ejemplo, cuenta que fue a partir de entrar en la Academia de Bellas Artes de Bruselas en el 1916 cuando empezó a investigar creando obras abstractas. Luego trabajo creando pósteres y carteles de publicidad, experimentó con el dadaísmo y ya en el 1925 creó su primera obra surrealista. También se hizo muy amigo de Dalí durante su estancia en Cadaqués y experimento con el impresionismo.
Su exposición es enorme y cuenta con muchas obras que me llamaron mucho la atención. A continuación, os voy a hablar de mis favoritas:
Serie El imperio de las luces
Existen varios cuadros muy parecidos dentro de esta serie y es una de sus más famosas. Me sorprendió mucho los contrastes dentro del cuadro creados a partir de la presencia o no de la luz. Mientras que por la casa y el bosque parece que es de noche, el cielo está soleado indicando que es de día.
La elipse
Para mí es un ejemplo perfecto de surrealismo. Parece que en él hay figuras reconocibles, pero la forma en que combinan no es usual. Esta obra provoca. Me hizo pensar y reflexionar, que es lo que al final Magritte buscaba.
La bonne foi
Dos de sus dos cuadros más conocidos que son El hijo del hombre y la famosa obra con la pipa dibujada pero que lleva escrito «Esto no es una pipa», no se encuentran en el museo. Por eso me hizo tanta ilusión ver este, que combina el hombre, por un lado, y por el otro la pipa.
En resumen, para todos aquellos amantes del arte visitar el Museo de Magritte es algo obligatorio. Aunque yo creo que en general lo es para cualquier persona que visite la capital belga, ya que sus obras son únicas y Magritte es incomparable con ningún otro pintor. De hecho, si aún queréis conocer más sobre él, en Bruselas se encuentra la que fue su casa que también se puede visitar.
¡Espero que os haya gustado!
Mireia Prados
Soy de Sant Joan Despí (un pueblo de las afueras de Barcelona), tengo 20 años y actualmente debería empezar tercero de Publicidad y Relaciones Públicas en la UPF. Y digo debería porque este curso va a ser un poco diferente a los anteriores, ya que voy a hacer un Erasmus en Bélgica. De hecho, por eso decidí presentarme para ser corresponsal, y no tuve ninguna duda en la categoría que quería cubrir
Me considero una persona organizada, trabajadora y creativa a la que le encanta estar con su familia y amigos. Además, también me encantan los animales y viajar. Y aunque ya estuve hace unos años en Bélgica y me enamoré del país cuando visité Gante, Brujas y Bruselas, no tuve la oportunidad de conocer Amberes, que es donde voy a estar viviendo
