Como en todas partes, la fiesta de fin de año es una celebración muy importante y que en casi todos los países del mundo tiene lugar la noche del 31 de diciembre. En Bruselas, esta fiesta no pasa desapercibida bajo el nombre de “Iris Fireworks”
Bruselas despide al año 2013 y recibe al año 2014 con un espectáculo que sigue la tradición. Después de las 00:00h fuegos artificiales se lanzarán desde el Mont des Arts y después de estas semanas de ambiente navideño en Bruselas, la víspera de Año Nuevo será la guinda del pastel.
No solo los habitantes de Bruselas están invitados, turistas y curiosos pueden acercarse y vivir el año de esta forma tan diferente. Además, para no hacer larga la espera, siempre cuentan con espectáculos y entretenimientos musicales hasta las campanadas de medianoche: Puedes ir a la Place de l’Albertina y boulevard de l’Empereury después disfrutar del espectáculo en el Mont des Arts o también se puede ir antes a la Place Royale y la rue Montagne de la Cour, para tener unas mejores vistas de los fuegos.
Mucha gente saldrá a la calle a ver este espectáculo, en parte también debido a que varios DJs se encargarán de mantener la fiesta por todo lo alto, a partir de las 22:30h, parando a media noche para los fuegos y continuando hasta bien entrada la madrugada.
Ya sabes, si estás en Bruselas el día 31 ¡no te pierdas el tradicional espectáculo belga en vísperas de año nuevo!
Además, si quieres seguir con la tradición española, puedes llevarte las uvas 
Soy Mayte Hervás y seré la nueva corresponsal Erasmus durante los próximos 5 meses en la ciudad de Bruselas. Lo cierto es que tengo muchas ganas de empezar esta nueva etapa en el blog, en el que podréis echar un vistazo a mi forma de ver la vida belga con alegría y humor, aunque también seré seria cuando tenga que serlo.
Curiosear por el extranjero es una gran virtud que se instaló en mí desde muy pequeña y por ello he esperado tres largos años de mi carrera de traducción para poder conseguirlo. ¡Me voy a Bruselas, y encima corresponsal!
Bruselas siempre ha captado mi atención, no solo por ser el centro neurálgico de Europa, sino por las diferencias culturales que existen entre la capital de Bélgica y España. Toda mi vida he vivido en una pequeña ciudad de Albacete (Hellín) y desde que me fui a estudiar he estado viviendo en Alicante; ambas ciudades completamente opuestas a la capital grande y europea que me va a acoger este año.La cantidad de eventos musicales que oferta Bélgica, que va desde pequeñas salas con música en directo hasta festivales, ¡me tiene impaciente por llegar!
