Cuenta la leyenda que allá por 1390, nació un niño llamado Johannes de Eyck a orillas del río Mosa, Bélgica. Johannes, más conocido como Jan Van Eyck, estuvo rodeado de pintores y pintoras durante su infancia y siendo muy joven comenzó a dibujar. Le encantaba prestar atención a los detalles en sus pinturas y era un chico muy, pero que muy, refinado. Sus cuadros poseen unos colores muy luminosos y describen paisajes que él vio a lo largo de su vida.
Gracias a su talento, rápidamente se hizo famosísimo y trabajó para las personas más adineradas de su época, pudiendo vivir del arte durante toda su vida. Al principio, le gustaba pintar cuadros muy pequeñitos, pero más tarde pasó a crear obras tan grandes como el Políptico de Gante, el cual mide tres metros y medio de largo que pintó junto a su hermano Hubert Van Eyck.
Van Eyck está considerado uno de los mejores pintores del norte de Europa del siglo XV y actualmente la ciudad de Gante le rinde homenaje. Existen muchísimas oportunidades para conocerlo y, lo mejor de todo, es que todos los eventos estarán disponibles hasta el 24 de junio de 2021, así que, con un poco de suerte, puedes venir a verlos.
Para más información, navega por: https://visit.gent.be/es/omg-van-eyck-was-here
Teresa Jiménez
¡Me presento! Mi nombre es Teresa Jiménez Casas (Rete para los amigos), vengo de Córdoba y soy guitarrista flamenca profesional. Estudio Administración y Dirección de Empresas y desde septiembre estoy de Erasmus en la Universidad de Gante (UGent).
Soy una persona extrovertida, espontánea y con muchísimas inquietudes. He viajado por medio mundo, he conocido a gentes de todo el planeta, y ahora que estoy en Bélgica, no espero otra cosa, sino que esta experiencia se convierta en la mejor de todas las que he vivido hasta ahora.
Estoy enamorada de la cultura, especialmente de la música. Toco la guitarra flamenca desde que tenía ocho añitos y me he subido a escenarios de España, Eslovenia, Italia y Croacia. Además, me encanta escribir. Hace unos meses terminé mi primera novela corta y tengo un sinfín de mini relatos escondidos por toda mi casa.
