Cuando visito otro país, me gusta ver, tocar y degustar los productos locales de ese inexplorado lugar, así como conocer nuevos ingredientes para innovar en la cocina de mi propia casa. Y es que tengo que admitir que me fascina descubrir productos y probar cosas nuevas.
Normalmente, este “hobby” me puede llevar mucho rato, ya que para descubrir hay que visitar supermercados, fruterías, tiendas de comida preparada, tiendas de bebidas… Y, aun así, muchas veces me voy con la sensación de no haberlo probado y descubierto todo. Así que una buena manera de no dejarme nada, es ir al mercado local de alimentos.
El mercado semanal de Brujas se celebra cada miércoles y sábado por la mañana en la plaza Het Zand y facilita mucho las cosas si, como yo, eres una intrépida buscadora de nuevos productos y sabores.
El mercado lo tiene todo, desde puestos de frutas y verduras, hasta camiones con comida preparada. Pasando claro, por sus tiendas de pescado y carnicerías, sus hornos de pan y bollería, sus floristerías y, mucha atención, porque esto ya no es tan habitual, sus puestos de croquetas, y es que me estoy empezando a dar cuenta de que los belgas son unos auténticos fanáticos de este popular plato de origen francés. Las hacen de muchos tipos, aunque las más típicas son las de patata.
Visitar el mercado de Brujas es una experiencia que no te puedes perder si visitas la ciudad.
¡Mucha suerte descubriendo nuevos sabores!