Si habéis visitado Bruselas, sin duda habréis pasado por la Grand Place y habréis dedicado un tiempo a apreciar la belleza de cada uno de edificios que se encuentran en ella. Pero, allí se esconde un pequeño detalle del que solo se dan cuenta los más observadores.
Os habéis fijado en el imponente gótico Ayuntamiento de la capital belga, ¿verdad? ¿Habéis notado que este no es simétrico?
El ala izquierda de este edificio fue construida durante la primera mitad del siglo XV, más concretamente en 1402, bajo el cargo del arquitecto flamenco Jacob Van Thienen. Años más tarde, entre 1439 y 1469 se construyó el Ayuntamiento de Lovaina, un espectacular edificio de estilo gótico brabantino que “superaba” al de la capital. Por ello, los bruselenses se dispusieron a ampliar el suyo.
En 1440 comenzó, bajo el mando del arquitecto Jan Van Ruysbroeck, la construcción del ala derecha. No obstante, debido al espacio reducido entre el centro de la edificación y las fachadas de las casas gremiales junto a él, no podía construirse de manera simétrica. Por ese motivo, el arquitecto tuvo que encontrar el modo de esconder esta no simetría de espacio con los elementos de su fachada. Si os fijáis, el ala izquierda tiene 10 arcos y el ala derecha 7 (esto sin contar los dos de la torre central). Estos 7 últimos son más amplios, más altos, más redondeados y tienen un ventanal mayor que los del otro lado. Además, las estatuas de la parte derecha son también más grandes que la de la izquierda. Todos estos elementos ayudan a crear sensación de amplitud en el ala derecha del Ayuntamiento, lo que ayuda a esconder la falta de simetría del mismo.
Sin embargo, si os fijáis en la puerta principal de entrada (que tuvo que ser cambiada con su ampliación) esta no está centrada con respecto a la torre que se haya encima de ella. Cuenta la leyenda que el arquitecto fue tan criticado por este hecho, que subió a lo alto de la torre y se lanzó al vacío.
Recordad que sí queréis más información sobre las casas gremiales que se encontraban en la Grand Place podéis visitar uno de mis posts anteriores.
Saludos,
Mónica