¡Hola a todos!
Algo que no falta en Amberes, es lugares que visitar, y entre estos lugares turísticos, las espectaculares iglesias repartidas por la ciudad no pasan desapercibidas. Por esa razón, este post va dedicado a Sint-Andrieskerk, la Iglesia de San Andrés, una iglesia católica situada en el actual barrio de la moda de Amberes.
Este lugar ha pasado por diversas reconstrucciones y reformas, así como por cambios en su dirección. Se construyó en el siglo XVI por parte de los frailes agustinos. En 1566 su interior fue víctima de la Beeldenstorm, un movimiento de ataque a las imágenes religiosas por su rechazo. Tras este suceso la iglesia se dividió entre católicos y calvinistas, e incluso se construyó un muro para hacer más evidente esta separación. En 1585, tras la caída de Amberes en la guerra de los Ochenta Años, la iglesia volvió a ser de los católicos en su totalidad, quienes la ampliaron y la redecoraron. Casi doscientos años más tarde, en 1755, la torre se derrumbó, por lo que una nueva torre barroca fue alzada en su lugar.
Su exterior posee un estilo gótico tardío, pero debido a sus varios procesos de reforma, el estilo predominante en el interior es el barroco. En el interior se albergan pinturas de reconocidos pintores de la ciudad como Ambrosius Francken, Otto van Veen, Anthony van Dyck y Theodoor Boeyermans, entre otros. También se encuentran esculturas de los flamencos Pieter Verbrugghen I o Willem Ignatius Kerricx, a quién debemos agradecer el altar mayor del templo.
Su impresionante altar mayor, su realista púlpito y las múltiples obras de arte que se encuentran en su interior hacen que la Iglesia de San Andrés sea un must en vuestro paso por Amberes. El acceso a la Iglesia es gratuito. El horario de apertura entre noviembre y marzo es de lunes a sábado de 9 a 12. Para poder visitar el museo de la iglesia (SAM) que cuenta con más detalle toda la historia del templo, hay que realizar una reserva previa en grupo.
¡Nos leemos pronto!
Mónica