¡Hola queridos lectores!
Hoy os voy a hablar de Melchior Broederlam, un pintor flamenco de estilo gótico internacional. Este estilo, perteneciente al arte gótico desarrollado entre el siglo XIV y XV, se caracteriza por el colorido de sus obras, bien decoradas y a menudo con oro (como el uso del pan de oro, una fina lámina de oro presente en algunas obras).
A pesar de que no se han recogido muchos datos sobre la vida del artista, su juventud y su educación se sabe que (tras previamente trabajar desde el año 1381 para Luis de Male, conde de Flandes) entre 1384 y 1409, sirvió al duque Felipe el Atrevido de Borgoña en la ciudad de Ypres como pintor de la corte, para la cual creaba retratos, trajes y elementos decorativos para algunas galerías y estancias del castillo de Hesdin, donde se alojó entre 1388 y 1392.
Paisajes amplios en verde y marrón que se diferencian de los personajes de sus ilustraciones, vestidos en rojo o azul son los elementos más representativos de las sus únicas dos obras del autor que se conservan hoy en día, ya que el paradero del resto se desconoce por los movimientos iconoclastas de la época que rechazaban las imágenes religiosas.
Las obras que se conservan son dos paneles del retablo de la Crucifixión de Dijon, que realizó para el duque para el que trabajaba. Uno de ellos representa La Anunciación y la Visitación y el otro la Presentación en el Templo y la Huida a Egipto, ambos pintados al óleo sobre madera. Estas dos obras se encuentran a día de hoy en el Museo de Bellas Artes de Dijon, en Francia.
Tras la muerte de Felipe el Atrevido (duque al que servía) realizó algunos trabajos para su esposa (Margarita de Flandes), su sucesor (Juan el Atrevido) y algunos concejales de la ciudad de Ypres.
Refinamiento, elegancia del gótico internacional, colores brillantes, uso de pan de oro y pigmentos caros son las características que representan al autor flamenco, que empleaba en sus obras el realismo, y técnicas como la perspectiva y el claroscuro.
Saludos,
Mónica