¡Hola a todxs! ¿Qué tal? ¿Cómo estáis? Espero que todo vaya bien. Yo he estado algo desaparecida debido a los exámenes, pero ya estoy de vuelta. Esta semana, como vais a comprobar vengo con posts muy de naturaleza, de campo, planes muy naturales y sencillos pero que, a mí, personalmente, me llenan el alma. ¿Y eso por qué? Pues por si no sabíais, este pasado 5 de junio fue el día mundial del Medio Ambiente, el cual tenemos que proteger y querer mucho. Por ello, he decidido orientar los posts de esta semana en cuanto a esta temática.
Hace un par de semanas, estuvimos en la Abadía de Lovaina o también denominada Abdij van Park, un lugar precioso, con muchísimo espacio, un lago enorme, un castillo impresionante y muchos lugares que recorrer.
Allí pasamos prácticamente todo el día de picnic, respirando aire puro, rodeada de buena vibra y disfrutando de la naturaleza. Al fin y al cabo, planes muy sencillos, que no necesitan prácticamente nada y que hay que valorar y poner en práctica mucho más.
UN POCO DE HISTORIA…
La Abadía del Parque es una abadía mostense (de la Orden de canónigos Premonstratenses) que data de 1129, cuando esta zona era el parque de caza de Godofredo I de Lovaina, el Duque de Brabante, y tuvo la suerte de no sufrir nunca destrozos durante las muchas guerras que han asolado a Bélgica desde mucho antes de que este país existiese como tal, conservando así su aspecto como muy pocas abadías de Flandes han podido hacerlo, pudiendo mediante sencillas restauraciones recuperar su apariencia de los siglos XVI y XVII.
En la parte más alta del recinto de la abadía se encuentra el cementerio de la misma en el que muchas personalidades de Lovaina, la mayoría relacionadas con su universidad, la KU Leuven descansan hoy en día.
Frente al cementerio se encuentra la entrada al Museo de Arte Religioso y Cultura de la abadía, con una interesante colección de arte y una biblioteca con más de 6000 documentos antiguos.
Con todo ello, os animo fuertemente a que os paséis por allí y disfrutéis de un plan bastante simple como dar un paseo en bici o a pie, o simplemente disfrutéis de un bonito picnic, merece mucho la pena, de verdad.
¡Nos vemos en el próximo post! ¡Un saludo! 😊