No sé que pasa en Amberes pero lo cierto es que tiene unos atardeceres realmente impresionantes. Lo comprobé a los pocos días de llegar, en el típico paseo por el centro para hacer un primer contacto con la ciudad. Al llegar a Grote Markt, podía dislumbrar entre las fachadas de las casas circundantes, un cielo naranjado, con ligeros tonos magentas y violetas. Según ibamos caminando hacia el río Escalda los colores se iban haciendo más intensos, y finalmente cuando llegamos a la orilla pude observar uno de los atardeceres más bonitos que he visto nunca. El río parecia teñido de rojo por el reflejo del cielo y las ventanas de espejo de algunos edificios eran totalmente naranjas.
Para despedir a mi primera visita desde España, ya tenia apuntada en mi cabeza la localización y la hora exacta, así que decidi llevarlo al río Escalda y esperar a que el sol se pusiese. Fue una tarde agradable, mientras veiamos como los barcos pasaban lentamente en frente de nosotros. Además el waffle de chocolate que nos comimos hizo que todo fuese mucho mejor
Aqui os dejo algunas fotos de la primera puesta de sol que pude ver, ¡para que veias que no exagero!