Hola lectores! Hoy quiero hablaros sobre el jardín del museo Hof van Busleyden. Si visitas Malinas (Mechelen) y te apetece un momento de tranquilidad en un rincón especial, el jardín del museo Hof van Busleyden es una pequeña joya que no deberías pasar por alto.
Aunque el edificio renacentista que alberga el museo ya merece una visita por sí mismo, su jardín interior añade un toque inesperado: es un oasis de calma en pleno centro histórico.
Este jardín, de acceso gratuito, se encuentra justo al lado de la entrada principal del museo. Rodeado por muros de ladrillo antiguo y con vistas a la arquitectura noble del palacio, ofrece bancos donde sentarse a leer, comer algo o simplemente disfrutar del ambiente. A pesar de estar tan cerca de calles transitadas, se respira una paz muy especial.
Durante mi visita, me sorprendió lo bien cuidado que estaba todo: arbustos recortados con precisión, flores de temporada y una sensación de recogimiento que invita a quedarse ahí. Es el tipo de lugar que no aparece siempre en las guías turísticas, pero que hace que una ciudad se sienta más acogedora.
Ese día hacía un tiempo espectacular. Calor, cielo azul y un sol radiante que parecía invitar a todo el mundo a salir a la calle. Al entrar al jardín, lo primero que vi fueron varios bancos ocupados por señores mayores, algunos tomando el sol con los ojos cerrados, otros comiendo tranquilos, charlando entre ellos o hojeando un libro.
Te dejo aquí la dirección.

Hola! Soy Sofía Acuña Rodríguez. Tengo 21 años y estudio Biología en Santiago de Compostela. Estoy este curso de erasmus en Bruselas y durante el segundo cuatrimestre del curso 2024-2025 seré la nueva corresponsal de Naturaleza y Ciclismo. Espero poder transmitiros las cosas tan bonitas que Flandes tiene por enseñar. Nos vemos!